domingo, 22 de septiembre de 2013

Arquitectura Inca en Choquekancha, Lares - Calca (Cusco) - Br. Arqueologo Hugo Bravo Zuniga











LARES distrito de Calca - Cusco, cuenta con numerosos sitios arqueológicos prehispánicos,  para llegar se toma la ruta carrozable de Cusco - Pisaq-Calca-Lares, 100 kms. de recorrido aproximadamente. En el trayecto encontramos los baños termales de Machakancha y construcciones de arquitectura inca como Calispugyo y Ancasmarka,  con un entorno paisajístico hermoso.  Choquekancha está ubicada  a siete kilómetros de Lares y está articulado mediante caminos prehispánicos con otros sitios arqueológicos Qoriwayrachina, Llukumarca y Aukani.
Choquekancha a 3,250 m.s.n.m, de una belleza excepcional, un cielo azul y la visión de la cordillera que alberga las apachetas y willcas (cumbres y abras) donde se forma el rio Lares que serpentea hasta llegar a la selva. Choquecancha tiene cuatro anexos: Paucarpata, Matinga, Manto y Ñuqchuyoq.  Limita por el  norte con Laqo Yavero, por el este con Amparaes, por el sur con la comunidad de Q'eyupay y por el oeste con el rio Lares y las comunidades de Q'achín y Rosaspata.  Su topografía es  accidentada donde abundan las piedras pizarra y una  vegetación  nativa que sobresale como el kiswar. El riachuelo Atojani desciende del cerro Qellolloyoq y es aprovechado para la agricultura.  Existen  numerosas terrazas de cultivo de la época pre hispánica. 

Hugo Bravo Zuniga
Bachiller en Arqueología
Universidad Nacional San Antonio Abad del Cusco
hbz5496@hotmail.com

Recorriendo el Koricancha, centro espiritual de la Ciudad Inca del Qosqo - Arq. Alfredo Mujica Yépez








Hace unos días, realizamos una breve visita a la Ciudad del Cusco, después de un viaje de trabajo por Chinchero, las pocas horas en la capital del Tawantinsuyo, nos alcanzaron para encontrarnos con el Koricancha, centro espiritual del Qosqo Inka, un espacio sagrado que conserva en sus piedras la grandeza del incario.

Fue muy grato constatar que este importante centro está muy bien conservado y cuenta con todas las facilidades para hacer grata y provechosa la visita de los miles de turistas que colman estos recintos llenos de historia y fuerza.

Para entender mejor la trascendencia del Koricancha, debemos recordar que  es parte de la capital Inka, de la Ciudad a la que Pachacuti Inka le dió la forma de un Puma, animal que representa al Kai-pacha  (aquí y ahora), el mundo  ubicado sobre el Ucku-pacha asociado al pasado y el mundo inferior, y que esta a su vez debajo del Hanan- Pacha o mundo superior asociado al futuro. 

Dentro de la configuración zoomórfica del Puma, el Koricancha ocuparía la zona donde se ubican los órganos sexuales del felino. Esta ubicación podría parecer extraña si la analizamos desde el modo de pensar occidental, pero si la entendemos dentro del pensamiento andino, veremos que  es una ubicación privilegiada, pues  la zona de los órganos sexuales representan el poder de procrear, de dar vida, de multiplicarse.



La Calle que une la actual plazuela de Limacpampa chico y  la plazuela de entrada al Koricancha, era el eje místico, por donde el Padre Sol (Tayta Inti), enviaba sus primeros rayos de luz y energía para que ingresen al recinto sagrado el día 21 de Junio, día de la mas grande fiesta Inca, la del solsticio de invierno.

La primera luz de ese día llegaba al recinto y lo iluminaba, el recinto solar lleno de energía comunicaba  esta a los jardines del sol que se ubicaban en el otro extremo, un gran muro curvado representaba la forma testicular  encargada de distribuir  esta energía sagrada a los jardines del sol, fecundando y bendiciendo a las imágenes de animales y plantas hechas en oro que allí se encontraban y representaban toda la riqueza del Tawantinsuyo.


El Koricancha estaba organizado en torno a un gran patio hacia el cual se alineaban los recintos del sol, de la luna, de las estrella del amanecer (Venus) , del Rayo (Illapa) y del Arco Iris (Kuichi). En conjunto representaba a todas las deidades del mundo superior o Hanan-Pacha.

Lo mas destacado en este lugar sacro es la calidad con la que  pulieron la piedra, obteniendo muros de gran grosor y un magnífico acabado, donde las juntas entre las piedras son tan perfectas que es imposible que ingrese una tarjeta de visita.   A continuación algunas de las fotos que son testimonio de la grandeza y majestad de estos recintos.

Reproducción del dibujo donde se representan las deidades de los tres mundos Hanan-Pacha, Kai-Pacha y Ucku-Pacha, las deidades del Sol y la Luna, el Arco Iris, etc. Se dice que esta es la representación de un altar del Koricancha.

Jardines del Sol, según Garcilaso de la Vega, aquí se tenían reproducciones en oro de todas las especies animales y vegetales del Tawantinsuyo, las que eran "fecundadas" por los rayos del Padre Sol, durante el solsticio de Invierno, desde el muro curvo que representaba el testículo de la ciudad Puma.

Protuberancias en el muro curvo del Koricancha, estas permiten ubicar mediante la sombra del mediodía los solsticios de invierno y verano y los equinoccios, para fines agrícolas y religiosos.

El Koricancha era el centro de mas de trescientos ejes sagrados o ceques ( según Tom Zuidema)  que concurrían en este espacio místico, la importancia del Koricancha como  centro o qosqo de una red de  espacios sagrados en todo el tawantinsuyo.
Representación de la Vía Láctea o río sagrado del cielo, donde la gran cantidad de estrellas que puede verse en los limpios cielos andinos, permite también apreciar los vacíos  donde se identificaban formas como la de una llama y su pastor, de una perdiz, de un sapo, etc. Estas formas se reproducían en pueblos ubicados a lo largo del rio sagrado del Kai- Pacha, el Wilcamayo.



Nicho y portada de forma trapezoidal, de acuerdo a la inclinación hacia el interior de los muros, se aprecian una seria de hoyos que se piensan servían para sujetar  algún tipo de ornamento sagrado.


Maqueta de reciente factura, utilizada para explicar la forma que tenía originalmente el Koricancha, recintos de piedra, techados con paja o ichu que rodeaban un espacio central.


Piedras donde se aprecia los canales tallados en bajo relieve que se practicaban a las piedras a fin de fijar unas con otras utilizando unos ganchos metálicos posiblemente de cobre o aleación.


Otras piedras donde se puede observar canaletas de drenaje para evacuar las aguas, según se dice.  Hay una zona en el Koricancha donde se observan diversas piedras con similares formas.


Vista del recinto denominado templo del rayo, se aprecia la gran calidad en el acabado y pulido de los bloques de piedra, formando un muro de gran belleza y fuerza.


Pequeña piedra ubicada entre dos piedras de gran tamaño, se desconoce el propósito de esta composición,  La piedra tienen un color mas oscuro por  ser frecuentemente  tocada por los visitantes.

jueves, 4 de abril de 2013

MACHUPICCHU Y EL AGUA


Recientemente un grupo de obreros y profesionales del Parque Arqueológico de Machu Picchu encontraron cuatro fuentes de culto al agua cuando realizaban trabajos de investigación en el sector de los andenes orientales grupo cuatro de dicho patrimonio.






La arqueóloga residente de la obra, Piedad Champi, asegura que la fuente principal de culto al agua posee bloques de piedra labrada en sus costados, y la captación de agua se hace a través de un canal inca sin solera que finaliza en un sistema de desarenado por el método de rebalse.

La captación se lleva a cabo de las faldas de una montaña donde se ha ubicado el ojo de agua, cuya proyección del líquido conduce a otro canal abierto que se comunica a otra fuente ubicada metros más abajo.

La segunda fuente es más pequeña, posee parámentos laterales, encierra una  fuente de distribución con muros armados de elementos líticos pequeños tallados en un solo bloque de roca que abastece a otra en la que destacan dos protuberancias de piedra.







Esta fuente, al cambiar o romper la tensión superficial provoca que el agua varíe en su precipitación o forma de caída. Está articulada a las dos anteriores mediante canales superficiales y subterráneos.

La última tiene características similares a las anteriores, pero la distribución del agua se da en ángulo recto para disipar la velocidad del agua, de esta forma se cumple el ciclo vital del líquido que sale de una fuente u ojo de agua, y en su discurrir se une con el río sagrado de los incas: el Vilcanota.

Las cuatro fuentes tienen carácter religioso de culto al agua, porque en la cosmovisión andina el agua simboliza lo masculino y la pachamama lo femenino.

La evidencia de las cuatro fuentes constituye un ejemplo claro de la alta tecnología hidráulica que alcanzaron los incas, porque sigue funcionando a pesar de haber transcurrido más de 500 años y haber sido soterradas por la tierra, bloques de piedra y la tupida vegetación.

La fuente principal de culto al agua posee bloques de piedra labrada en sus costados, y la captación de agua se hace a través de un canal inca sin solera que finaliza en un sistema de desarenado por el método de rebalse.






La captación se lleva a cabo de las faldas de una montaña donde se ha ubicado el ojo de agua, cuya proyección del líquido conduce a otro canal abierto que se comunica a otra fuente ubicada metros más abajo.

La segunda fuente es más pequeña, posee paramentos laterales, encierra una  fuente de distribución con muros armados de elementos líticos pequeños tallados en un solo bloque de roca que abastece a otra en la que destacan dos protuberancias de piedra.

Esta fuente, al cambiar o romper la tensión superficial provoca que el agua varíe en su precipitación o forma de caída. Está articulada a las dos anteriores mediante canales superficiales y subterráneos.

La última tiene características similares a las anteriores, pero la distribución del agua se da en ángulo recto para disipar la velocidad del agua, de esta forma se cumple el ciclo vital del líquido que sale de una fuente u ojo de agua, y en su discurrir se une con el río sagrado de los incas: el Vilcanota.





martes, 5 de febrero de 2013

Un lugar lleno de armonia con el medio ambiente... Choquequirao Br. Arq. Hugo Bravo Zuniga



Escondida en lo alto de una escarpada montaña se encuentra esta ciudadela inca.Choquequirao, que en quechua significa cuna de oro, esta ubicada en la región del Cusco, al sur del Perú. Fué edificada en los últimos años del imperio incaico fue posiblemente un asentamiento político y administrativo que luego sirvió de bastión y refugio durante la resistencia Inca contra los conquistadores.

AQUI EL VIDEO



Este recinto arqueológico recientemente ha cobrando un alto nivel de importancia y curiosidad tanto turística como cultural, lo cual está impulsado la investigación en el sitio arqueológico y sus alrededores.
Se extiende en un área de 2000 hectáreas, donde se ubican un conjunto de estructuras por encima de los 3100 msnm, y forma parte de una serie de complejos arquitectónicos dentro del 
Valle de Vilcabamba .

Su posición geográfica, su historia y el atractivo, como fuente de ingresos para las poblaciones aledañas, hacen de Choquequirao un sitio agradable y tentador como forma alternativa de turismo cultural.



La única manera de llegar al recinto arqueológico es a pie. Tras largas caminatas, se puede llegar desde distintos poblados aledaños. Desde el cusco se puede viajara hasta el poblado de Cachora (Apurímac) por alrededor de 30 kilómetros en un camino en zigzag, mediante una caminata de unos 4 días que puede ser hecha en mulas o a caballo. 

Las jornadas tienen una duración promedio de cinco a seis horas cada día Se accede desde los centros poblados de Cachora, Huanipaca, Huancacalle, Santa Teresa y Mollepata, mediante caminos peatonales, pasando por los pisos ecológicos de puna baja, puna alta y las faldas del Nevado Salqantay. En el camino ha Choquequirao no hay hoteles ni albergues pero si hay zonas para acampar aunque no se cuenta con servicios básicos. 

jueves, 24 de enero de 2013

Inkarri, en el solsticio de verano


El 21 de diciembre del 2012, día del solsticio de verano, cuando el sol sale desde el punto extremo del sur este, el grupo Waka Pacha, liderado por el Arq. Ángel Contreras instaló la Casa del Origen, un diseño contemporáneo  inspirado en la esencia de la arquitectura y el arte del Perú  Milenario. Se trataba de  mostrar simbólicamente el  renacimiento de nuestra verdadera arquitectura en medio de un espacio actual, de la ciudad de hoy, hecha a imagen y semejanza de ciudades del hemisferio norte, en medio del bullicio, del concreto y del vidrio. Con la colaboración de la Arq. Judith Miranda, se hicieron estas tomas para mostrar este momento  tan significativo.


Inkarri, la casa del origen en pleno Parque Keneddy de Miraflores, el mundo de nuestras culturas ancestrales que renace , invita a los ciudadanos del siglo 21 a experimentar el recorrido por este singular objeto.

El modelo reducido de la casa del origen en madera, junto a una reproducción cerámica, la vinculación  entre  el espacio para vivir y los objetos utilitarios.

Se colocaron objetos cerámicos de diversas culturas, para  demostrar la continuidad en el tiempo y el espacio de nuestra cultura, o  eran  pueblos aislados, había conexión e intercambio entre ellos, los conocimientos se compartían y fueron acumulándose hasta llegar al Tawantinsuyo.

Los ceramios que se colocaron al interior, para poder mostrar todas las posibilidades de colocar objetos, representan también la conexión  directa con nuestras culturas ancestrales,  es el compromiso de continuar con lo que se hizo hace mas de 500 años .
El barro que cubre la estructura interna de madera, caña y soga, moldeado a mano, tiene aun las huellas de quienes experimentamos formar  estos muros a pulso, es  sin duda el testimonio de trabajar con nuestros materiales y nuestros brazos.

Los planos horizontales y verticales, suben y bajan  recordando  la morfología de los andes,  se acercan y alejan como las montañas entre los valles y quebradas, es el espacio nuestro que se recrea al interior, es la experiencia del habitante milenario que reproduce su cosmos exterior al interior de la casa del origen.




La casa del origen, a diferencia de la arquitectura  actual hecha principalmente para verse de afuera, se desarrolla del interior al exterior, a diferencia del uso del concreto y el vidrio, se materializa  del barro y el agua, de la caña y la soga, elementos  tan cercanos, tan nuestros. Las formas externas invitan a entrar  al espacio central al corazón de la casa, el lugar del encuentro entre  el ser humano y su esencia  su origen, su ser milenario, auténtico, único, conectado con el cosmos.

Para construir la casa del origen, se elaboraron previamente maquetas a una escala menor, eran modelos de estudio para poder manejar adecuadamente las fuerzas, la resistencia de los materiales, el reto fue formar una estructura  que permita materializar  la casa, empleando  madera y caña, materiales nobles, flexibles, al alcance del ser humano. La experiencia ordenar los elementos  hacer de todos uno. 

Igualmente interesante fue transferir los espacios y volúmenes que originalmente fueron hechos en arcilla a la madera, tallar o esculpir en un material mas resistente, los espacios interiores , como para sentir la misma experiencia que tuvieron nuestros mayores al crear volúmenes y espacios en piedra.


Posteriormente se dió el paso de llevar de la escala de maqueta a una escala humana (aun reducida) que permita experimentar realmente  este conjunto de formas que contienen el espacio interior. 

El espacio interior permite también una relación con el espacio exterior, lo de dentro se comunica con lo de fuera, la composición de volúmenes entrantes y salientes  permiten  una composición de luz y sombra muy interesante.

Los nichos y espacios entrantes, permiten colocar diferentes objetos utilitarios, en esta instalación se ha colocado de manera simbólica algunos objetos cerámicos y textiles que nos recuerdan las culturas ancestrales.

El Arquitecto Contreras, explica a cada visitante el propósito de la muestra,  responde pacientemente  a las preguntas de los que se acercan y  muestra la casa del origen, invitando a los que así lo deseen a recorrerla y experimentar  las sensaciones que produce. 

El ingreso denominado "Kapac ñan", es el camino que ingresa a manera de rampa, partiendo a su vez el volumen en dos, generando los espacios opuestos y complementarios, duales que son los que mueven el mundo según la cosmogonía andina.

La Arquitecta Miranda ubicada en el centro del espacio interior, en el ombligo o eje el "Qosqo" de la casa del origen, un punto a partir del cual se puede aprehender  el total espacio y el volumen. Es el lugar que recibe toda la energía de la casa.